A veces te quiero y otras te hiero

Así somos:

Tormenta o calma. 
Luz u oscuridad.
Ángel o demonio. 
Cielo o infierno. 


Y resulta que a veces te quiero, te extraño y anhelo correr a tus brazos y empezar de nuevo. Pero otras, te hiero, te alejo, te quemo y te encierro con doble llave en mi memoria, solo para no pensar que existes y que me subiste más allá del cielo, para luego dejarme caer cinco metros abajo del infierno...

Te quiero porque me viste cuando era "invisible". Pero te hiero por todas las veces que  dormí llorando, pensando en lo que te habías convertido...

Te quiero porque saltaste todos los obstáculos hasta llegar a mi. Pero te hiero porque se te olvidó lo que recorriste y el miedo que te producía pensar en perderme.

Te quiero porque eras mejor que el hombre que soñaba, por el simple hecho de ser real. Pero te hiero porque es la única forma de empatar ese amor que ya no es.

Y así vamos por la vida...
Queriendo e hiriendo, amando u odiando.
Unas veces  te van a querer, y otras, te van a herir...
Pero lo más lindo es querer, querer mucho, con todo el corazón,
  así que no te arrepientas nunca de sentirlo, de darlo todo, porque de esta forma
demuestras cuánto eres capaz de brindar, eso sí, sin esperar nada a cambio... Por eso voto
y les digo SÍ a esas personas que dan un 100%, y no un 50% por esperar otro 50% para sentirse
completos.

¡Denlo todo, no saben lo maravilloso que les espera al final!




Comentarios

Entradas populares